La guerrilla de las FARC ha comenzado su repliegue a «sitios seguros» con el fin de evitar «provocaciones», tras conocer que el nuevo plazo impuesto por el presidente Juan Manuel Santos para el cese al fuego bilateral expira el 31 de octubre. Pastor Alape, miembro del secretariado de las FARC, ordenó desde La Habana a «todas nuestras unidades moverse a posiciones seguras».
Los acontecimientos se aceleraron en la noche bogotana, tras 48 horas de declaraciones y conversaciones y en vísperas del reencuentro de los dos líderes colombianos, Santos y el ex presidente Álvaro Uribe, anunciado para este miércoles en la Casa de Nariño.
«Se decretó el ceso al fuego bilateral y definitivo con las FARC hasta el 31 de octubre y yo espero que podamos avanzar», anunció Santos. «El tiempo es muy importante, no podemos prolongar este proceso y este diálogo por mucho tiempo, porque estamos en una zona gris, en una especie de limbo que es riesgoso y puede echar al traste todo el proceso», apremió el presidente, sabedor de que vive una carrera contrarreloj.
El anunció tomó por sorpresa a los comandantes guerrilleros, que ayer martes se reunieron con dos enviados presidenciales en La Habana. «¿De ahí para adelante continúa la guerra?», cuestionó Timochenko a través de un tuit, su herramienta habitual de comunicación.
Más tarde, el líder de las FARC hizo un llamamiento al pueblo colombiano «a respaldar decididamente mediante la movilización el acuerdo final. Paz a la calle».
El senador Roy Barreras, uno de los dirigentes del santismo más comprometido con el diálogo, advirtió que el «cese de fuego bilateral que está en acuerdos se planeó con monitoreo de la ONU. El no los dejó si mandato. Gracias por acompañarnos hasta el 31».
Desde: LANACION
