Chile.- Con un discreto e íntimo funeral en Santiago se dio la despedida final el sábado a Margot Honecker, ex primera dama de Alemania del Este, ex ministra de Educación e influyente miembro del Partido Comunista de su país, quien falleció el viernes en Chile. Tenía 89 años.
Una treintena de personas, entre las que se encontraban familiares como su hija y su nieto, miembros del Partido Comunista chileno al que Honecker pertenecía y destacadas figuras por la defensa de los derechos humanos, acudieron al cementerio Parque del Recuerdo del barrio de Recoleta, en la capital chilena, a despedir a la que es considerada una de las últimas figuras clave de la República Democrática Alemana (RDA).
No se vio a ningún personaje político destacado de la vida de Chile.
Tras la llegada del féretro envuelto en flores tuvo lugar una ceremonia privada e íntima a la que no tuvo acceso la prensa. Después se trasladaron los restos a la unidad de cremación, momento en que se cubrió el ataúd con una bandera roja del Partido Comunista y se le colocó una corona de flores que portaba su simbología.
Honecker —quien nunca mostró arrepentimiento respecto al historial de represión de su país ni por la existencia del muro que lo separó durante varias décadas— vivía en Chile desde 1992, tres años después de la caída del Muro de Berlín, junto a su marido, el primer ministro Erich Honecker, quien falleció en 1994.
Ambos fueron recibidos en Chile tras la caída del muro, ya que contaban con amistades y conocidos debido a que muchos chilenos fueron acogidos en la RDA tras el golpe militar del general Augusto Pinochet en 1973, entre ellos la actual presidenta Michelle Bachelet y su madre, Ángela Jeria.
Durante los últimos años Margot Honecker llevó una vida discreta, alejada de actos públicos.
