Quito, Ecuador.- La cifra de muertos por un aluvión que afectó varios barrios de Quito ascendió a 18, en medio del fuerte aguacero que azotó la capital ecuatoriana, con un récord de precipitaciones, informaron las autoridades.
El general César Zapata, explicó que 14 cuerpos se encuentran en medicina legal, otros dos trasladados y a dos más los rescataron entre los escombros.
Las autoridades temen el aumento de víctimas pues continúan las labores de rescate y búsqueda en viviendas y vehículos arrastrados por las aguas.
El Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias de Ecuador tenía en sus registros a nueve desaparecidos, 200 afectados y más de 30 heridos.
Familiares de desaparecidos se han sumado a las tareas de rescate, mientras claman a las autoridades por información centralizada.
En la zona, los moradores intentaban rescatar sus enseres en medio de gruesas capas de lodo, en tanto al menos dos personas estaban atrapadas en partes altas de viviendas a la espera de que los bomberos los ayuden a salir.
Postes de tendido eléctrico caído, casas dañadas, automóviles destruidos y una cancha de deportes cubierta de lodo son algunas de las imágenes que se pudieron apreciar con más claridad a la luz del día.
Unidades de bomberos, policías, de las asistencias sanitarias y de las Fuerzas Armadas, entre otras instituciones, participan en las tareas de rescate, remoción de escombros y atención a los ciudadanos afectados en la zona del alud.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, indicó que realizan acciones de contención y atención psicológica a las familias afectadas
El Municipio y organizaciones privadas han activado puntos de recepción de donaciones para los afectados por el aluvión; el fenómeno afectó una zona donde hace unos 40 años ocurrió una situación similar.
Según el alcalde de Quito, Santiago Guarderas, la tempestad que cayó sobre Quito alcanzó un récord de precipitaciones, con 75 litros por metro cuadrado.
Esto, comentó, supone una cifra récord en casi dos décadas, pues un volumen de lluvias similar solo se había registrado en el año 2003.
El aluvión desbordó la capacidad de las infraestructuras de captación y embalse de las aguas lluvias que bajan desde el volcán Pichincha.
El fuerte aguacero que cayó en la capital coincidió con una oleada de tempestades que han afectado a gran parte del país.
Fuente: EFE
