Cuba.- Nuestra enviada especial Ana Rossina Troncoso, nos cuanta que la visita de Barack Obama a La Habana Cuba, ha generado diversas expectativa a pesar de las lluvias que ha estado incidiendo en la isla.
A primera hora de la mañana el mandatario estadounidense cumplió con la típica ceremonia de la ofrenda floral ante el monumento del héroe nacional cubano y prócer independentista José Martí, en la emblemática Plaza de la Revolución de La Habana, en el marco de su histórica visita a Cuba.
Tras la ceremonia, Obama dejó de lado el protocolo para pedir a su equipo que le tomaran una foto con la famosa efigie de Ernesto «El Che» Guevara a su espalda, algo poco habitual en ese acto solemne, en el que le acompañó el vicepresidente del Consejo de Estado cubano, Salvador Valdés Mesa.
Luego de la colocación de la ofrenda, el presidente caminó por la plaza y decidió visitar al museo, un obelisco de 17 metros de altura en forma de estrella de 5 puntas, que fue construido en la década de 1960.
Ahí firmó el libro de visitas y luego caminó hasta el Palacio de la Revolución, donde su homólogo Raúl Castro le esperaba para el inicio oficial de si visita.
Un momento muy emotivo para los cubanos fue cuando Obama asistió a un restaurat, donde al desmontase del vehículo saludo a todos los residentes, causando gran revuelo.
En la agenda de este marte de Barack Obama estará en el Gran Teatro Alicia Alonso, que está ubicado en La Habana vieja, donde sostendrá reuniones importantes y escuchar a líderes de la disidencia cubanos, luego se trasladará al Estadio de Béisbol Latinoamericano que está en el Cerro, donde la selección cubana se enfrentará con el equipo de las Grandes Ligas, Tampa Bay Rays.
