La economía estadounidense se desaceleró a una tasa anualizada y desestacionalizada del 1,1% en el primer trimestre de este año, según los datos del PIB publicados este jueves por el Departamento de Comercio.
Eso cae por debajo de las expectativas de los economistas del 2% y marca un ritmo mucho más lento en comparación con los dos trimestres anteriores, ya que el aumento de las tasas de interés y la alta inflación pesaron sobre los consumidores y las empresas.
El gasto del consumidor, que representa más de dos tercios de la producción económica, fue el que más contribuyó al crecimiento del primer trimestre, ya que los estadounidenses gastaron con fuerza tanto en bienes como en servicios. El gasto fue más sólido en comparación con el trimestre anterior, impulsado por la compra de automóviles y repuestos de vehículos y el gasto en servicios de atención médica.
Sin embargo, el gasto empresarial cayó a principios de año, ya que las empresas gastaron menos en equipos.
Las solicitudes semanales de desempleo caen a 230.000
Las solicitudes de beneficios por desempleo por primera vez cayeron la semana pasada.
Hubo 230.000 reclamos iniciales presentados durante la semana que finalizó el 22 de abril, 16.000 menos que un total revisado al alza de 246.000 reclamos la semana anterior. Los economistas esperaban 248.000 reclamos iniciales, según estimaciones de consenso sobre Refinitiv.
El promedio móvil de cuatro semanas fue de 236.000.
Las solicitudes continuas, que son presentadas por personas que han recibido beneficios por desempleo durante más de una semana, descendieron inesperadamente a 1.858 millones para la semana que finalizó el 15 de abril desde los 1.861 millones revisados de la semana anterior.
Los economistas esperaban 1.878 millones, según Refinitiv.
Las solicitudes semanales de desempleo han tenido una tendencia al alza en las últimas semanas, lo que refleja un debilitamiento en el mercado laboral de EE.UU. y un aumento de los informes de despidos. Sin embargo, se mantienen por debajo de los promedios históricos: en la década anterior a la pandemia, las reclamaciones semanales promediaron 311.000.
