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AT&T y Time Warner defienden una fusión rodeada de suspicacias

Los máximos directivos de AT&T y Time Warner defendieron hoy el acuerdo de fusión anunciado este fin de semana, pero sus explicaciones no han logrado vencer el escepticismo de los analistas por los desafíos que representa la operación.

«La combinación creará una compañía única que generará una ola de innovación sobre cómo accede la gente a los contenidos de los medios», afirmó hoy el máximo directivo de AT&T, Randall Stephenson, en un vídeo difundido por el grupo de telecomunicaciones.

AT&T anunció el sábado que comprará por 79.000 millones de euros Time Warner, un conglomerado que incluye las cadenas CNN y TNT y canales de entretenimiento como HBO y TBS, además de los estudios Warner Bros, entre otras marcas.

Esta operación, que se espera cerrar a fines del año próximo si consigue la luz verde de los reguladores, sigue a la decisión de AT&T de extender su negocio tras comprar en 2014 la firma de televisión por satélite DirecTV por 49.000 millones de dólares.

Con la incorporación de los contenidos que genera Time Warner, AT&T se convierte en un gigante combinado que, como sostiene Stephenson, parte de las ventajas que ofrece un esquema de «pura integración vertical».

«Los medios de comunicación y la industria de telecomunicaciones están convergiendo», afirmó Stephenson al explicar por qué AT&T se ha lanzado a esta nueva aventura.

«El futuro del vídeo es móvil, y el futuro de los dispositivos móviles es el vídeo», insistió.

La idea, según el directivo de AT&T, es unir la red de más de cien millones de clientes de esa firma, en teléfonos móviles, DirecTV y banda ancha de internet, con el «mejor talento creativo» de la industria que representa Time Warner.

El máximo directivo de esta firma, Jeff Bewkes, insistió también en las ventajas de combinar ambas firmas, y aseguró que la fusión permitirá a Timer Warner «innovar más rápido».

La operación ha creado ciertas suspicacias en el plano político, que fueron expresadas el mismo sábado por el candidato presidencial republicano, Donald Trump, cuando señaló que la fusión corre el riesgo de «destruir la democracia».

Un día después, AT&T tuvo que salir al paso de estas y otras sospechas con un comunicado en el que anunció que a partir de la fusión Time Warner «seguirá operando como ahora, con autonomía en todas sus divisiones».

«CNN es un símbolo estadounidense de independencia», afirmó Stephenson.

«Mi consejo de administración y yo tenemos claro que CNN seguirá siendo completamente independiente desde la perspectiva editorial», agregó.

Pero, fundamentalmente, también ha desatado suspicacias legales por el difícil proceso de aprobación de las autoridades reguladoras, anotadas unánimemente por analistas, inversores y agencias calificadoras.

«Esperamos que la fusión propuesta reciba una vigilancia de los reguladores muy alta y la probabilidad de que la supere depende del resultado de las próximas elecciones presidenciales», afirmó en su análisis la firma de Morningstar.

Y es que tras los comicios del 8 de noviembre entrará una nueva administración en enero próximo que colocará nuevas figuras y adoptará nuevas filosofías en instancias claves para este acuerdo, como el Departamento de Justicia y la agencia reguladora de comunicaciones.

Esas suspicacias hicieron que los títulos de AT&T, hasta el año pasado integrados en el Dow Jones, perdieran hoy al cierre un 1,65 %, que se suma al retroceso del 3 % que tuvo el viernes pasado, cuando comenzaron a filtrarse noticias sobre esta fusión.

Y Time Warner, que ganó un 7,82 % el viernes, terminó hoy con una pérdida del 3,02 % y se quedó en 86,78 dólares la acción, muy lejos del precio de 107,5 dólares en el que está valorado cada título en la fusión anunciada el sábado.

Parte del retroceso de AT&T, uno de los pesos pesados de Wall Street, está ligado a las primeras valoraciones hechas por agencias calificadoras, incluida Moody’s, que anunció hoy que ponía en revisión para una posible baja la calidad crediticia de AT&T.

Según Moody’s, la intención de AT&T de comprar Time Warner la mitad en efectivo y el resto con intercambio de acciones puede consumir la mayor parte del flujo de cada disponible como consecuencia del pago de dividendos e intereses.

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