Una relación sexual es el conjunto de comportamientos que realizan al menos dos personas con el objetivo de dar o recibir placer sexual. Sin embargo, desde la antigüedad, se ha controlado el libre disfrute de la sexualidad femenina.
Si bien la mujer, en la actualidad, se ha apoderado de su sexualidad a través del autoconocimiento y la autodeterminación, generando cambios beneficiosos para ella como para su pareja. Por muchos años ha sido determinada por ideologías religiosas y estereotipos sociales que han influenciado en el placer de la mujer.
Muchas culturas han visto la sexualidad de la mujer como subordinada a la sexualidad masculina. Siendo objeto de burlas, denigración y desagrado, desde el sangrado vaginal normal, calificado como una maldición, hasta el acto en si del orgasmo.
Restricciones culturales
En el pasado, para controlar el comportamiento lascivo en las féminas se utilizaba el cinturón de castidad. Era una prenda de vestir diseñada para proteger su castidad, lo que incluía evitar la masturbación y el acceso sexual por parte de hombres no autorizados.
No obstante, dependiendo del país, en nuestros días se utilizan algunos métodos de control como, la mutilación genital femenina en algunas partes de África, Oriente Medio y comunidades inmigrantes en países Occidentales.
Además del rechazo por parte de los hombres y de la sociedad en general, así como, amenazas y horrendos asesinatos, si una chica incurre en estas prácticas antes del matrimonio.
En vista de este debatido tema, consultamos a la divulgadora sexual Alison Pérez, para arrojar un poco de luz y conocimiento sobre la sexualidad de la mujer y los tabúes que prevalecen en pleno siglo XXI.
Para Pérez la sexualidad femenina sigue siendo un escándalo debido a la falta de aceptación de que la mujer tiene los mismos deseos y derechos sexuales que los hombres.
“Es una lástima que esa cultura y pensamiento machista de aquella época persista al sol de hoy. Sin embargo, es un tema que se está trabajando”, dijo.
Influencias
Señaló también que las industrias de la moda, música, cine y televisión han condicionado a la sociedad sobre cuál es el cuerpo ideal, cómo ser una mujer deseada, entre otros estereotipos.
Otro sector que ha influenciado en este comportamiento, es la pornografía, ya que ha sido la escuela de una gran generación que la ha tomado como ejemplo en la práctica sexual.
“En estos vídeos no se aprecia la práctica segura y adecuada que merece cada persona. Pero allí acuden cientos de jóvenes en busca del aprendizaje que no obtienen en los hogares y las escuelas. Ellos creen que ese es el trato correcto”, señaló Pérez.
“Los menores de edad no cuenta con una enseñanza verídica sobre la importancia y responsabilidad del sexo, las relaciones y el respeto a decisiones de los demás”, a fin de que conozcan su cuerpo y evite contraer enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados, enfatizó.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en las regiones más pobres del planeta a una de cada tres mujeres son madres en la adolescencia y República Dominicana no es la excepción.
Tres de cada cuatro embarazos en adolescentes en RD son no intencionales, según reveló el análisis “Unión Temprana y Embarazo Adolescente en República Dominicana: dos desafíos que persisten”.
Presentado por la Oficina Nacional de Estadística (ONE) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), en 2020.
En cuanto a las enfermedades de transmisión sexual, en ese mismo año, el Servicio de Atención Sanitaria (Hospiten) advirtió del incremento de este tipo de infecciones en la población joven.
Tabúes de la sexualidad femenina
Estos mitos y concepciones erróneas permanecen pese a que la mujer ha alcanzado un mayor empoderamiento en los últimos años, liberándose de complejos y ataduras. Por ello, te enumeramos los tabúes a los que se enfrenta la mujer actual.
Antes de iniciar el proceso de autoconocimiento y derribar los tabúes, la mujer primero debe aceptar y amar su cuerpo, recomienda Pérez.
En segundo lugar, debe conocer su cuerpo y sus gustos, para no dejar la responsabilidad de su placer en manos de otra persona.
Y por último, eliminar estos mitos y creencias erróneas como:
- Ver la masturbación como mala o como búsqueda solo de placer y, no como un bien para seguir conociendo y aceptando tu cuerpo.
- Creer que el sexo es solo llegar al orgasmo.
- Desconocer que el estrés, la ansiedad y otros trastornos de la mente pueden disminuir el apetito sexual.
- Pensar que la masturbación se puede volver una adicción.
- No incluir juguetes sexuales para el placer a solas o con tú pareja.
- Tener sexo con condón no es lo mismo.
- El sexo anal es pecado.
- Las pastillas del día después siempre funcionan.
- Las mujeres tienen menos deseo sexual que los hombres.
- La mujer no necesita estimulación.
Al finalizar, Pérez exhortó a las mujeres a mantener la calma y enfocarse en disfrutar las bondades de su cuerpo.
Lee también:
- Agresión sexual a niños: 78 denuncias de incesto entre enero y febrero
- ¿Cuánto invierten las mujeres, anual y mensual en toallas sanitarias?
- Conoce algunas actividades para el Día de San Valentín
Por: Kederlin Nivar Andujar
