Unas 300,000 personas acudirán al desfile con motivo del WorldPride que este año se celebra en Sídney, en el contexto del emblemático Mardi Gras del país oceánico, según estimaciones de los organizadores.
Bajo el lema «reunir, soñar, amplificar», unas 12,500 personas recorrerán las céntricas calles de la urbe como parte de unas 200 comparsas, entre ellas lesbianas en motocicletas, militares y policías, así como los indígenas australianos, entre otros, para celebrar su identidad sexual y de género.
El WorldPride (Orgullo Mundial), que se celebra por primera vez en el hemisferio sur, acoge más de 300 eventos entre el 17 de febrero y el 5 de marzo y espera atraer a 78,000 visitantes del extranjero.
Arropada en una oda a la diversidad sexual y de género, Sídney, engalanada desde hace días con los colores del arcoiris, da este viernes el pistoletazo de salida con el concierto «Live and Proud» (Vivir y estar orgulloso), con la australiana Kylie Minogue, icono LGTBI, como cabeza de cartel.
Esa fiesta musical, cerca de la Casa de la Ópera de Sídney, será la antesala del fabuloso desfile LGTBI que regresa por primera vez a las calles de Sídney tras la pandemia de la covid-19, mientras que en 2022 se celebró dentro un estadio y con límite de aforo.
En esta 45 edición del Mardi Gras desfilará por primera vez un mandatario australiano, el laborista Anthony Albanese, cuyo gobierno se ha comprometido a avanzar por los derechos del colectivo LGTBI.
Las autoridades del estado de Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney, calculan que el festival del WorldPride inyectará unos 112 millones de dólares australianos (76 millones de dólares estadounidenses o 72 millones de euros) a la economía regional.
Fuente: EFE
