Hawái, EE. UU.-El fundador de Facebook y presidente de Meta, Mark Zuckerberg, estaría construyendo un increíble y secreto complejo de 100 millones de dólares en Hawái. De acuerdo con un reporte reciente, el “enorme búnker postapocalíptico”.
Dicha residencia contará con un refugio subterráneo. Hasta ahora, se trata de un proyecto del que nadie puede hablar, ya que los trabajadores involucrados habrían firmado contratos de confidencialidad.
De acuerdo con Wired, que tuvo acceso a los planos y entrevistó a algunos exempleados, un muro de casi dos metros bloquea la vista desde una carretera cercana. El sitio también está protegido por guardias de seguridad, que vigilan la puerta de entrada y patrullan las playas de los alrededores, mientras algunas camionetas entran y salen con materiales de construcción.
Localización del búnker de Mark Zuckerberg
La propiedad, conocida como Ko’olau Ranch, se localiza al noreste de la isla hawaiana de Kauai, entre los centros turísticos de Kapaa y Hanalei. En 2021, Honolulú Star-Advertiser dio a conocer que Zuckerberg y su esposa, Priscilla Chan, compraron poco más de 44 hectáreas de tierra agrícola, que se sumaron a dos adquisiciones anteriores: poco más de 280 hectáreas que adquirieron por alrededor de US$100 millones a finales de 2014 y 240 hectáreas por US$53.
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Nadie que trabaje en este proyecto puede hablar sobre lo que está construyendo el magnate de tecnología, asegura Wired. Casi cualquiera que pase por la seguridad, está sujeto a un estricto acuerdo de confidencialidad. Los empleados afirman saber de colegas que fueron retirados del proyecto por publicar en las redes sociales algunos detalles. Además, entre los equipos de construcción tienen prohibido hablar. “El proyecto es tan grande que una parte no insignificante de la isla está sujeta a la NDA (acuerdo de no divulgación)”, indican.
Detalles del terreno
La planificación y construcción del complejo contempla casi 560 hectáreas, incluirá, según los documentos verificados por el medio citado, un refugio subterráneo de 1500 metros cuadrados, con lo que parece ser una puerta resistente a explosiones, su propio suministro de energía y alimentos. Los locales especulan con que el sitio se convertirá en una especie de búnker postapocalíptico, en caso de que la civilización colapse.
El complejo consta de más de una docena de edificios con al menos 30 dormitorios y 30 baños. Se centra en dos mansiones con una superficie total comparable a un campo de fútbol profesional, que contienen múltiples ascensores, oficinas, salas de conferencias y una cocina de tamaño industrial. Será autosuficiente, con su propio tanque de agua, junto con un sistema de bomba.
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En una zona boscosa cercana, se planea una red de 11 casas colocadas en las copas de los árboles, que estarán conectadas por puentes, según el medio citado. Un edificio del otro lado de las mansiones principales incluirá un gimnasio de tamaño completo, piscinas, sauna, jacuzzi y cancha de tenis. Además, las dos mansiones centrales estarían unidas por un túnel que se bifurca hacia el refugio subterráneo, con espacio habitable, una sala de máquinas y una salida de escape a la que se puede acceder a través de una escalera.
Con información de: La Nación
