Bobby Kristina permanece en estado de coma en una clínica de cuidados paliativos. Algún miembro de su familia decidió tomar una foto de la hija de la cantante y posteriormente ponerla a la venta a los medios de comunicación, tales como «TMZ» o «Entertainment Tonight», por la escandalosa cifra de 100.000 dólares.
El padre de Bobby ha tomado la decisión de impedir que numerosos familiares accedan a la habitación en la que se encuentra, hasta que no se sepa quien ha sido el traidor. Únicamente permite la entrada a Cissy, la abuela y Pat, la tía. El resto de su familia paterna lo tienen totalmente prohibido.
Una de las tías de Bobby ha concedido una entrevista y explica que quiere que se someta a un detector de mentiras a todos los familiares, para poder descubrir quien ha sido el que ha intentado vender la fotografía. Se muestra muy enfadada e indignada con que se cuestione a todos los miembros de la familia.
La joven lleva ingresada en la clínica desde hace dos semanas, ya que antes se encontraba en un hospital de Georgia. A pesar de haber sido trasladada a dicho lugar, la chica de 22 años ha ido deteriorándose. Bobby fue encontrada en su casa por un amigo, en la bañera, inconsciente, por lo que estuvo demasiado tiempo sin recibir oxígeno en el cerebro lo que ha ocasionado su estado de coma desde el pasado mes de enero.
