La Radio Pública Nacional de Estados Unidos fue testigo de un total rechazo contra la socialité, Kim Kardashian.
Durante el show radial, «Wait Wait… Don’t Tell Me!», la intervención de Kim Kardashian causó que muchos de los seguidores de la estación llamaran enfurecidos.
Aunque la diva, respondió correctamente las preguntas que le hacían, parece que no importó. Algunos de los oyentes amenazaron con no donar un sólo centavo más la estación. Estaban indignadas con la solo invitación.
Ya desde la semana pasada se venía gestando la total molestia de los radioescuchas. La emisora acaudaló cientos de quejas por el concurso humorístico en el que también Kardashian participó. En esa ocasión su intervención fue «Not My Job» («No es mi trabajo») en el que se sometió a preguntas sobre el líder norcoreano Kim Jong Un.
Otros oyentes saltaron en su defensa como Elizabeth Jenson, dijo que no tenía claro qué hacer con la ira desatada por la intervención de 11 minutos de Kardashian. Dijo que aunque la estrella de «reality show» no fue una gran invitada, «estuvo graciosa» y tuvo un par de frases divertidas.
Lo que pareció una buena idea, esa de invitar a Kim Kardashian a la Radio Pública (NPR) se convirtió en un caos.
