La salida de Julio César Valentín del Partido de la Liberación Dominicana supone un «suicidio político» para el alto dirigente. Por lo menos, así lo consideran legisladores peledeistas que, al mismo, reconocen es un «duro golpe» para esa organización.
Los compañeros de quien fuera presidente de la Cámara de Diputados y posteriormente senador están conscientes de que la salida de un dirigente de la trayectoria de Julio César Valentín no se puede minimizar.
Sin embargo, advierten el daño mayor se lo está haciendo a su propia carrera política.