EE.UU se encuentra en la tercera ola de contagios desde que comenzó la pandemia
Redacción internacional.- El presidente de EE UU, Donald Trump, habla del COVID-19 en sus últimos días de campaña para cuestionar el trabajo de los sanitarios, este viernes, en un mitin en Michigan. Trump aseguró que los médicos que atienden a pacientes con Covid-19 “ganan más dinero” si reportan que sus pacientes han muerto por el virus.
Hasta ahora unas nueve millones de personas han enfermado por el coronavirus y 229.500 han fallecido en el país, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
Trump ha comparado el caso de Estados Unidos con el de Alemania –donde se han presentado 500.000 casos y 10.000 muertes por la covid-19– para afirmar, sin sostener con pruebas sus palabras, que la diferencia en el número de enfermos es por la forma en la que los médicos hacen el recuento de enfermos y fallecidos.
“Si sufres del corazón y estás a punto de morir o tienes cáncer y vas a morir pronto, y te contagias de covid, lo contamos como covid. Nuestros doctores ganan más dinero si alguien muere de covid. Lo saben, ¿verdad? Nuestros doctores son gente muy lista, así que lo que hacen es decir ‘lo siento, pero todo el mundo muere de covid’”, ha asegurado.
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“Pero en Alemania, en otros lugares, si tienes un ataque al corazón o cáncer, una enfermedad terminal, dicen que mueres de cáncer, de un ataque al corazón. Aquí, ‘en caso de duda, pon covid’. Esto es así. Dirán que es terrible lo que digo, pero es la verdad. Son como 2.000 dólares más. Esto solo nos podía suceder a nosotros”, ha agregado.
Trump se encuentra en el cierre de campaña viajando por los Estados bisagra para arrebatarle votos al demócrata Joe Biden. Estas declaraciones del presidente llegan cuando estas regiones sufren un repunte en los casos de coronavirus. Estados Unidos se encuentra en la tercera ola de contagios desde que comenzó la pandemia, en marzo pasado.
Trump se ha negado en los últimos meses a reconocer la seriedad de la pandemia. Desde el principio intentó minimizar su gravedad, alegando que se trataba de “una gripe”; después intentó echar toda la responsabilidad a China por el avance mundial del virus. En octubre, cayó enfermo de covid-18 y tuvo que ser hospitalizado.
Tras recibir un tratamiento intenso y ser dado de alta, Trump aseguró que enfermar fue “una bendición de Dios” y se embarcó en una serie de mítines en los que no se obliga a los asistentes a usar mascarilla.
Fuente: EL País
