Estilos de vida

La cita de la verdad: Una enfermedad para la solución

Por : Lucía Montes de Oca Zimbrón

@luciamontesdeoca

“El laboratorio más grande del mundo, el Serum en la India tiene un contrato con AstraZeneca, de que tienen que fabricarle mil millones de dosis, pero hay una cláusula en el contrato que establece que hasta que a ellos no les den sus mil millones de dosis, no hay fabricación para otros, incluyendo el centro Covax de donde nosotros, al igual que otros países tenemos acceso a la búsqueda de la vacuna”.

“Tú te encuentras con Alemania, acordaron 450 millones de dosis para  y no les han dado una, entonces la primera vacuna que salió fue la rusa, la Sputnik y la primera opinión que salió internacionalmente, fue descalificándola, porque de lo que se trata es de miles, miles, miles y miles de millones de dólares y de euros, de eso es que se trata, tú tienes que descalificar una para tu imponer la tuya «.

Contaba con elocuencia en un programa Wilson Roa, expresidente del Colegio Médico Dominicano, destapando una vez más la camuflajeada ola ideológica desde un principio existente que cuestionaba la espontaneidad de la aún carente de explicación enfermedad de nuestra era.

Desde un inicio las teorías conspirativas han ido y venido como las calles y avenidas más transitadas de nuestras ciudades, hemos escuchado desde planes para disminuir la población mundial, Bill Gates  y turbios objetivos, hasta fuerzas omnipotentes y omnipresentes dispuestas a reestructurar los hasta el momento conocidos sistemas sociales, políticos y económicos.

La única cosa que logra deshacer desde las entrañas un empirismo, es una verdad construida sobre la base de contundentes pruebas, pero ni siquiera los organismos mundialmente representativos han podido de forma unánime dar con un verdadero inicio, mucho menos un  final.

Esto no solo incrementa y da pie a la continuidad de la desinformación y de múltiples absurdos, sino que en vista de la ausencia de pruebas y firmes posturas entorno al origen de la COVID-19 y a propósito de que si queda al descubierto del mundo la sed de beneficio y monopolio para una cura, deja a la imaginación y creatividad individual el dar con la razón y propósito de una enfermedad que en menos de un año supo doblegar al mundo burlándose de sus fronteras y hasta el momento concidas lógicas.

“Yo solo te conté media verdad al revés, que no es igual que media mentira”.

Canta Joaquín Sabina, querido y alabado por las tres últimas generaciones existentes y como al final del cuento, el verdadero idioma universal es la música, señoras y señores…sigamos cantando en lo que se “investiga el caso” y se enriquecen las farmacéuticas.

Fuente de las dos primeras citas: expresidente del Colegio Médico Dominicano(CMD) Wilson Roa a traves de Despierta con CDN.

Fotografía de dominio público: Judith Leyster, «El concierto» (1631-33) Óleo sobre tela, National Museum of Women in the Arts, Washington.

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