Por Joel Ortiz Rivera / [email protected]
El lanzador derecho de sangre boricua, Nelson Figueroa, declaró que no jugará pelota invernal este año y dio “las gracias” a la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), su gerente de operaciones, Frankie Higginbotham, y a los Indios de Mayagüez.
En un escrito que tituló “For The Love Of The Game” y que ligó a su cuenta de Twitter, Figueroa dijo que necesitaba “sacar del pecho las razones por las que no jugará esta campaña”.
“Algunas veces no se trata de dinero, se trata de que tu palabra no tiene precio. Así que ya que los Indios no me van a dejar jugar para el Escogido, no podré hacer dinero para mi familia este invierno y no tendré la oportunidad de ganar tres coronas al hilo con el equipo con el que he jugado por cuatro años”, dijo.
Figueroa fue reclamado por los Criollos de Caguas en el sorteo de los jugadores de Manatí, pero debido a que Cora no pudo llegar a un acuerdo con Figueroa, decidió liberarlo para que jugase donde quisiera.
Explicó Figueroa, quien jugó en el equipo que ganó plata en el Clásico Mundial de Béisbol, que hizo un pacto con Cora de que si era reclamado por algún equipo local no jugaría con nadie.
Pero 48 horas después, los Indios, acorde con las reglas de la LBPRC que dan prioridad a los equipos locales a contratar peloteros antes de dar permiso para ir a otro país, lo reclamaron.
Frankie Thon, gerente de los Indios, dijo que no se siente mal por el reclamo de Figueroa de que no ganará dinero.
“El acuerdo que hicieron es entre Álex y él, no tiene que ver con nosotros. Yo no sabía nada de eso. Le hicimos una oferta tan buena o mejor que la que tendría en Dominicana, donde se lo ganaría como importado”, sostuvo Thon, quien dijo que es amigo de Figueroa.
Hasta ayer, los Indios no han recibido aviso oficial alguno de Figueroa y su decisión.
En cuanto a Higginbotham, lo culpó de engañarlo en par de ocasiones, incluyendo la pasada campaña, cuando viajó a México y no pudo jugar con el Escogido en la Serie del Caribe.
“Gracias señor Higginbotham por hacerme más consciente de que, en vez de tomarse tiempo para oler las rosas, uno primero debe verificar que no haya serpientes en la grama y mirarse los zapatos después, porque nunca se sabe lo que se podría pisar”, escribió Figueroa.
