La tormenta tropical Hermine volvió a fortalecerse el sábado mientras se desplazaba lentamente hacia la costa este, estropeando el fin de semana ampliado con el Día del Trabajo en Estados Unidos.
Hermine ya causó dos muertes, dañó propiedades y dejó a centenares de miles sin electricidad desde Florida a Virginia. También propició un tornado en North Carolina.
«Este no es un fin de semana de playa para nadie desde el Atlántico Medio hasta el noreste», dijo Eric Blake, especialista en huracanes en el Centro Nacional de Huracanes en Miami.
La tormenta se formó en el golfo de México y el viernes azotó Florida como huracán categoría 1 antes de que se debilitara frente a Georgia.
Para las 2:00 de la tarde del sábado, Hermine aumentó nuevamente la intensidad de sus vientos máximos a 110 kph (70 mph) cuando se desplazaba hacia el este a 17 kph (10 mph).
El vórtice de la tormenta se ubicaba a 144,8 kilómetros (90 millas) al este de Duck, North Carolina.
Las alertas de tormenta tropical abarcaron zonas más al norte, hasta Connecticut y según previsiones podría haber una marejada ciclónica a lo largo del litoral, desde Virginia a New Jersey.
Los gobernadores de la zona anunciaron preparativos de emergencia.
Ante la gran intensidad de los vientos y la lluvia en North Carolina, todos los puentes que conducen hasta las islas Outer Banks fueron cerrados a causa de un accidente mortal en el Canal Intracostero del Atlántico.
El jefe de la policía del condado Tyrrell, Darryl Liverman, dijo al periódico Virginian-Pilot que los ventarrones voltearon un camión de carga con remolque; murió el conductor y fue cerrado el puente 64.
En la isla de Hatteras, en Outer Banks, un pequeño tornado propiciado por Hermine también volcó dos remolques, con resultado de cuatro personas heridas, dijeron las autoridades.
En Florida, un indigente murió debido a la caída de un árbol.
Los meteorólogos dijeron que el sistema podría adquirir nuevamente fuerza de huracán, entre el lunes y el miércoles, en su desplazamiento frente a las costas de Maryland a Connecticut. Después se debilitará otra vez frente a New England.
En Rehoboth Beach, Delaware, donde el sábado las autoridades cerraron la playa a transeúntes y prohibieron nadar, el tránsito de vehículos fue menor a lo normal, dijo Jim Derric, cuyo negocio familiar incluye un campo de mini golf, una tienda de conchas, un castillo inflable y una nevería.
