NUEVA YORK._ Después del anuncio la tarde de ayer lunes de la captura del capo de las drogas y calificado por el Departamento de Tesoro de Estados Unidos, como uno de los lavadores de dinero ilícito más prolijo, César Emilio Peralta Adamez (César El Abusador) en Cartagena, Colombia, numerosos dominicanos reaccionaron minimizando la voluntad de las autoridades dominicanas y descalificando la versión del jefe de la policía cartagenero, General Henry Sanabia, sobre operativos para arrestarlo, diciendo que “si no hubiera sido por el FBI a El Abusador nunca lo hubieran agarrado”.
La generalidad de los criollos que así opinaron se volcó en las redes sociales, programas dominicanos de televisión y radio, esquinas, establecimientos comerciales y taxis.
“Nunca, jamás lo hubieran hecho ellos, si el FBI no interviene”, dijo el taxista de Uber Francisco Rosario, mientras comía en un restaurante de la avenida Audubon en el Alto Manhattan.
María Pérez, una empleada en un salón de belleza en el mismo vecindario, señaló que “ni ellos mismos se lo creen, el hombre fue de seguro vendido por uno de los suyos que sabía donde él se escondía”.
Pérez, dijo que lo que realmente agilizó la captura de El Abusador, fue obviamente, la recompensa de $100 mil dólares ofrecida por el FBI, mientras los investigadores del Departamento del Tesoro, hacían lo suyo.
“¿El Abusador, preso en República Dominicana?, imposible”, remachó Tony Gálvez, empleado en una base de taxis.
Añadió que está claro que El Abusador contaba con la complicidad y la protección de funcionarios del Gobierno, incluyendo militares de altos rangos.
“¿Se fue así, tan fácil, llegando en un yate a Colombia y sin que nadie lo interceptara?”, preguntó Ramón Taveras, que estaba observando la caída de la nieve en la esquina de la calle 175 y avenida Wadsworth, cerca del teatro United Palace y La Plaza de Las Américas.
Dijo que los más de 20 años de impunidad con que operó El Abusador, amasando la inmensa fortuna que quizás le quiten los americanos, demuestran las conexiones que tenía en las “alturas”.
Tania Méndez, una trabajadora de una panadería (Bakery) en el sector Inwood, dijo que “pero… ¿qué pasa periodista, 20 años buscándolo y nadie lo encontraba?”.
Añadió que gracias a la intervención del FBI y su oferta de los $100 mil dólares, fue que apareció El Abusador.
Por: Miguel Cruz Tejada
