Insólito

Una mujer descubre que tiene cáncer gracias a una cámara térmica de una atracción turística

Tras el diagnóstico, Gill fue operada de cáncer de mama en etapa temprana

Bal Gill tiene 41 en años. En mayo, ella y su familia visitaron la Camera Obscura and World of Illusions, una de las principales atracciones turísticas de Edimburgo, en Escocia. Allí hay una serie de salas en las que los visitantes experimentan efectos ópticos que juegan con la luz y con la imagen. En una de estas salas hay una cámara térmica en la que las personas pueden ver la temperatura de su cuerpo. Fue entonces cuando Gill se fijó en que su seno izquierdo tenía un color distinto.

Hizo una foto de la imagen que aparecía en la pantalla porque le pareció curioso y siguió haciendo la visita al museo. Unos días más tarde, en su casa, revisó las fotos del móvil y se acordó de aquello que había visto en la cámara térmica. Fue entonces cuando en Internet encontró algunos artículos sobre cáncer de mama y cámaras térmicas. Fue a ver a un médico y este le confirmó que tenía un tumor en etapa temprana.

La termografía es un examen no invasivo que se hace con una cámara especial que mide la temperatura de la piel en la superficie del seno. Y es que a medida que las células cancerosas crecen y se multiplican, el flujo sanguíneo y el metabolismo son más altos en un tumor, por lo que la temperatura de esa zona del cuerpo aumenta.

Gill ha explicado lo afortunada que fue por darse cuenta de lo que le estaba sucediendo. Dice que cuando ella y su familia entraron en la sala de la cámara térmica, empezaron a mover los brazos para ver cómo reaccionaba la temperatura de sus cuerpos. “Al hacerlo, noté un punto caliente en mi seno izquierdo. Nos pareció extraño y, al mirar a todos, vimos que otras personas no tenían algo así”.

Tras el diagnóstico, Gill fue operada de cáncer de mama en etapa temprana. Se sometió a dos cirugías, incluida una mastectomía. En noviembre se tendrá que volver a operar, pero ya no necesitará quimioterapia o radioterapia. “Solo quiero decir gracias. Sin esta cámara nunca lo habría sabido. Sé que no es el propósito de ese lugar, pero para mí fue una visita que cambió mi vida”, explica Gill.

Fuente: LaVanguardia 

 

Más noticias