Ya había prometido en su campaña abrir la legislación para poder demandar a los periodistas
La Casa Blanca está examinando las formas en las que podría cambiar las leyes del país sobre calumnia y difamación para facilitar los procesos contra reporteros cuyas historias se consideren inexactas, confirmó el vocero presidencial, Sean Spicer.
«Es algo que se ha estado analizando tanto de manera sustantiva como logísticamente para ver cómo sucedería«, declaró Spicer en rueda de prensa este lunes.
Trump prometió durante su campaña «abrir» las leyes del país sobre difamación, un proceso que no podría ser completado por la Casa Blanca y que requeriría una enmienda constitucional o un total cambio de rumbo de los antecedentes de fallos de la Corte Suprema sobre la primera enmienda.
A su vez, el secretario general de la Casa Blanca, Reince Priebus, dijo el domingo a la cadena de televisión ABC que el asunto ha sido discutido, pero advirtió que «la manera en que se ejecuta o si esto irá a alguna parte es una historia diferente».
Trump amenazó reiteradamente con demandar a la prensa durante su campaña, y la primera dama Melania Trump alcanzó el mes pasado un arreglo extrajudicial multimillonario con la casa editorial del periódico británico Daily Mail que había publicado rumores sobre su carrera como modelo.
Las leyes contra la calumnia en Estados Unidos por lo general dificultan a las personalidades demandar a reporteros y a otras partes que las critiquen.
La Corte Suprema ha reiterado que un demandante debe demostrar no sólo que las declaraciones fueron inexactas sino que fueron emitidas con «dolo» o con «desapego imprudente» a la verdad, lo que se conoce jurídicamente como «real malicia».
Trump ha arremetido contra lo que considera una cobertura tendenciosa de la prensa, ha etiquetado a muchos medios como llenos de «noticias falsas» y los ha declarado «el enemigo del pueblo estadounidense». En sus discursos y su cuenta de Twitter es habitual hallar el término «fake news» para desacreditar a los medios opositores a su gobierno.
Durante un acto de campaña en Texas, Trump adelantó que quería «abrir» las leyes contra la difamación «para que cuando alguien escriba a propósito artículos negativos, horribles y falsos, podamos demandarlos y ganar mucho dinero».
«Créanme: si llego a la Presidencia, tendrán problemas. Vaya que los tendrán«, afirmó Trump en aquella ocasión.
