Las declaraciones reflejan la actitud amistosa adoptada por Duterte hacia Trump
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó a su homólogo de Filipinas, Rodrigo Duterte, y expresó el compromiso de Washington con su alianza y su interés en desarrollar «una cálida relación de trabajo«, y lo invitó a visitar la Casa Blanca, según informó este domingo un funcionario filipino.
Trump mencionó que esperaba visitar Filipinas en noviembre para una cumbre del Este de Asia organizada por Duterte y a la que asistirán varios líderes mundiales, e invitó al mandatario filipino a visitar la Casa Blanca, señaló el vocero presidencial Ernie Abella.
«Fue una conversación muy amistosa, en la cual los dos gobernantes discutieron las preocupaciones de la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia (ASEAN) sobre la seguridad regional, incluida la amenaza de Corea del Norte«, dijo por su parte la Casa Blanca en un comunicado.
«La conversación entre los presidentes fue cálida, con el presidente Trump expresando su comprensión y reconocimiento de los retos que afronta el presidente filipino, especialmente en lo relativo a las drogas graves«, indicó Abella en un comunicado. Según la Casa Blanca, Trump y Duterte hablaron «del hecho de que el Gobierno filipino lucha fuertemente para librar a su país de la droga, una lacra que afecta a muchos países en el mundo«.
Las declaraciones reflejan la actitud amistosa adoptada por Duterte hacia Trump, frente a la posición de rivalidad que mantenía con el expresidente Barack Obama, a quien una vez le dijo que se «vaya al infierno» por criticar su sangrienta lucha contra las drogas, entre otros insultos fuertes.
Durante los últimos meses del gobierno de Obama, el líder filipino se acercó a Rusia y China mientras amenazó repetidamente con terminar la larga alianza militar de ambas naciones.
Duterte, conocido por su lenguaje soez, ha fustigado las críticas a su guerra antinarcóticos, que Amnistía Internacional y otros grupos de derechos humanos han advertido que puede constituir un crimen contra la humanidad.
Fuente: AP