Autoridades en Estados Unidos están advirtiendo sobre los peligros de una intensa ola de calor que están afectando a gran parte del país y le piden a la población tomar precauciones.
Daniel Llargués, portavoz de FEMA, la agencia del gobierno que atiende y maneja emergencias en el país, dijo en entrevista con la Voz de América que este es un fenómeno que se debe tomar con mucha seriedad.
“Una ola de calor es tan peligrosa como un huracán o un tornado, puede causar muertes, y por eso nosotros tomamos todas las precauciones para alertar a la población”, asegura Llargués.
El portavoz de FEMA destaca que la temporada de verano atrae una gran cantidad de turistas a ciudades como Washington DC, Nueva York y otras de la costa oeste y muestran también preocupación por ellos.
“Nuestra sugerencia es que bajen nuestra aplicación fema.com en sus teléfonos inteligentes y en ella van a encontrar las alertas del tiempo con las temperaturas actuales y las sugerencias para refugios y sitios de ayuda en caso de emergencia”, dice Llargués.
Temperaturas que alcanzan los 36 y 38 grados centígrados en el termómetro y que con la humedad pasan de los 40 grados centígrados han afectado a varios Estados.
“Casi nunca vemos un fenómeno de un alcance tan amplio, son muchos los Estados que están bajo esta emergencia y por ello queremos que la gente tome precauciones, especialmente con los adultos mayores y los niños”, subraya el portavoz de FEMA.
Al mismo tiempo, Llargués dice que las principales recomendaciones están enfocadas en la necesidad de beber mucha agua, evitar bebidas alcohólicas o con contenido de cafeína, y mantenerse en sitios frescos.
“Caminar largas distancias o hacer ejercicio al aire libre no es recomendable. Se debe tomar en cuenta sitios con aire acondicionado para recuperar la temperatura del cuerpo cada cierto tiempo”, concluyó el portavoz de FEMA.
