La Asociación de Pescadores en la Lagua de Cabral, en Barahona, reclama al Ministerio de Medio Ambiente establecer controles en esa zona para evitar la incursión de personas que se dedican a realizar pescas y casería de manera clandestina.
Emilio Alcántara, presidente de la entidad, explica que las operaciones pesqueras en ese afluente fueron suspendidas por las autoridades durante varios meses con el propósito de fomentar las especies acuáticas que ha sido mermada considerablemente.
Plantea a las autoridades de Medio Ambiente establecer servicios de vigilancia militar más efectivo para contrarrestar la acción calificada de delincuencial que llevan a cabo intrusos provenientes del barrio El Llano y del pueblo arriba de Cabral.