LA HAYA, Holanda (AP) — Insurgentes en Siria utilizaron gas mostaza en agosto, y posiblemente provocaron la muerte de un infante, informó la Organización para la Prohibición de Armas Químicas.
El comunicado de la OPAQ es la primera confirmación oficial del uso de gas mostaza por parte de los insurgentes en Siria.
Una fuente de la OPAQ dijo el jueves a The Associated Press que los inspectores encontraron evidencia del uso de mostaza sulfurada, su nombre técnico, por parte de los insurgentes en la población de Marea durante un enfrentamiento el 21 de agosto. La confirmación demuestra un nuevo aumento en la brutal guerra civil siria, que ha cobrado hasta ahora la vida de 250.000 personas y obligó a millones más a huir del país.
«En este caso, el equipo fue capaz de confirmar con plena confianza que al menos dos personas resultaron expuestas al gas mostaza, y que es muy posible que los efectos de esta arma química hayan resultado en la muerte de un menor», dijo la organización.
Los investigadores basaron sus conclusiones en muestras analizadas y en entrevistas tanto con dos sobrevivientes como con los médicos que los atendieron.
La mostaza sulfurada es un arma química ilegal que ataca piel, ojos, pulmones y otros órganos.
Cuando Siria se unió a la OPAQ en 2013 bajo intensa presión de la comunidad internacional, declaró un arsenal químico de 1.300 toneladas, el cual fue destruido. No se ha esclarecido cómo es que los insurgentes obtuvieron el gas mostaza.
La organización de vigilancia internacional dijo que otra misión que investiga las acusaciones de que se utilizaron sustancias químicas tóxicas como armamento en Siria, encontró que posiblemente se utilizó cloro durante un combate en Idlib en marzo de este año.
En una tercera indagación, que revisa las acusaciones hechas por el gobierno sirio de que sus tropas fueron objetos de ataques químicos en Jobar el 29 de agosto, los inspectores comentaron que «no pudieron determinar con confianza que se haya utilizado alguna sustancia química a manera de arma».
Los hallazgos, que no atribuyen a nadie los ataques químicos, serán enviados al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
