La UEFA pide a la FIFA que posponga la elección presidencial del viernes, y dice que podría boicotear el congreso general de la FIFA de esta semana.
El secretario general de la UEFA, Gianni Infantino, dice que las investigaciones sobre corrupción en la FIFA «dañan la imagen de todo el fútbol». Indicó que las asociaciones europeas debatirán el jueves si boicotean el congreso en Zúrich.
Infantino señala que el comité ejecutivo de la UEFA quiere «un cambio en el liderazgo» de la FIFA, y que el congreso sea pospuesto y se convoquen a nueva selecciones en seis meses. La UEFA respalda al contrincante de Blatter, el príncipe Alí bin al-Hussein de Jordania, aunque Blatter es favorito para ser reelecto a un quinto período de cuatro años.
Blatter no está entre los siete dirigentes arrestados el miércoles. Su vocero dijo que Blatter coopera con las autoridades.
La cancillería de Rusia criticó a Estados Unidos por el arresto en Suiza de siete dirigentes de la FIFA.
Los cargos por corrupción contra 14 personas, incluyendo siete dirigentes de la FIFA, fueron anunciados el miércoles, poco después de los arrestos en Zúrich. Además, la fiscalía suiza anunció una investigación sobre la elección de Rusia y Catar como sedes de los mundiales de 2018 y 2022, respectivamente.
El vocero de la cancillería rusa, Alexander Lukashevich, dijoi que los arrestos son «evidentemente otro caso de aplicación extraterritorial ilegal de la ley estadounidense».
El ministro ruso de deportes y miembro del comité ejecutivo de la FIFA, Vitaly Mutko, dijoi a la AP que «no tenemos nada que ocultar», y que «estamos preparados para mostrarlo todo».
La Secretaria de Justicia estadounidense Loretta Lynch dice que los investigadores descubrieron 110 millones de dólares en sobornos relacionados con la planificación de la Copa América de 2016, organizada para conmemorar el centenario del torneo y que se realizará por primera vez en Estados Unidos.
Lynch dijo el miércoles que ese es sólo uno de los ejemplos de la corrupción que según la fiscalía estadounidense ha manchado al fútbol y la FIFA. Las autoridades estadounidenses radicaron acusaciones contra 14 personas por crimen organizado y otros cargos. Siete dirigentes de la FIFA fueron arrestados el miércoles en Zurich, y la fiscalía investiga a otras personas.
Lynch dijo que la conspiración involucra a dirigentes de la CONCACAF y la Conmebol.
La fiscalía estadounidense dice que descubrieron una docena de conspiraciones mientras investigaban la corrupción en la FIFA, y algunas de esas conspiraciones tenían que ver con la elección de Sudáfrica como sede del Mundial de 2010.
En una rueda de prensa el miércoles en Nueva York, la secretaria de Justicia interina Kelly Currie dijo que nueve conspiraciones involucran a firmas de mercadeo deportivo que buscaban negocios con torneos de la FIFA.
Currie dijo que oficiales corruptos de la FIFA pedían sobornos a las compañías, que usualmente generaban decenas de millones de dólares en ganancias de torneos como la Copa del Mundo.
La Secretaria de Justicia estadounidense Loretta Lynch dice que los casos de sobornos y corrupción han afectado a la FIFA durante al menos 24 años, mientras dirigentes del organismo solicitaban sobornos a firmas de mercadeo deportivo por los derechos de los torneos.
Lynch dice que, a partir de 1991, los involucrados «corrompieron el negocio del fútbol mundial para servir sus propios intereses y enriquecerse… esto lo hicieron una y otra vez, año tras año, torneo tras torneo».
El príncipe Alí bin al-Hussein de Jordania dijo que los arrestos de siete dirigentes de la FIFA en Zúrich demuestran que el fútbol mundial necesita un nuevo liderazgo.
El príncipe Alí es el único contrincante del mandamás de la FIFA, Joseph Blatter, en las elecciones presidenciales del viernes, una votación que se espera que Blatter gane abrumadoramente para un quinto período al mando.
«No podemos seguir con la crisis en la FIFA», dijo el príncipe Alí en un comunicado.
«La FIFA necesita nuevo liderazgo que gobierne, encamine y proteja a nuestras asociaciones nacionales… Un liderazgo que recupere la confianza de los cientos de millones de aficionados del fútbol alrededor del mundo», agregó.
La FIFA indicó el miércoles que la votación del viernes sigue en pie. Sin embargo, el comité ejecutivo de la UEFA señaló que discutirá la posibilidad de pedir que las elecciones sean pospuestas.
Jack Warner, ex vicepresidente de la FIFA acusado por las autoridades estadounidenses que investigan la corrupción en el fútbol, dijo que es inocente de cualquier acusación.
Warner es uno de 14 acusados —nueve funcionarios de la FIFA y cinco empresarios— acusados de asociación delictiva, fraude por medios electrónicos y lavado de dinero. Siete de los dirigentes de la FIFA fueron arrestados el miércoles en Zurich. Otros cuatro hombres se declararon culpables de las acusaciones en Estados Unidos que fueron divulgadas el miércoles, y las autoridades dicen que entre ellos hay dos hijos de Warner.
«No he contado con el debido proceso legal y ni siquiera he sido interrogado en este asunto. Reitero que soy inocente de cualquier cargo. Ya me salí de la política del fútbol mundial», dijo Warner, de 72 años.
«Si el Departamento de Justicia me quiere, sabe dónde encontrarme. Duermo tranquilo por la noche», agregó en una entrevista con el canal TV6 en Trinidad y Tobago, su país natal.
El president de la federación brasileña Marco Polo Del Nero culpó al ex miembro del comité ejecutivo de la FIFA, Ricardo Teixeira, por los contratos de mercadotecnia que las autoridades estadounidenses dicen que están relacionados con actos de corrupción.
Del Nero, quien en 2012 sucedió a Teixeira como delegado brasileño ante el comité ejecutivo, dijo que «no hay contratos» en la pesquisa estadounidense que hayan sido firmados desde que Teixeira dejó el cargo.
El Departamento de Justicia dijo que su investigación incluye acusaciones de soborno relacionadas con contratos comerciales para partidos por la Copa de Brasil y el contrato de la selección brasileña con Nike.
Teixeira y su es suegro, Joao Havelange, recibieron decenas de millones de dólares en sobornos por contratos de mercadotecnia relacionados con la Copa del Mundo antes que la agencia de mercadeo de la FIFA, ISL, se declarara en bancarrota en 2001. Havelange fue presidente de la FIFA por 24 años.
José María Marín, quien sucedió a Teixeira en la presidencia de la federación brasileña, es uno de los siete dirigentes arrestados el miércoles en Suiza a solicitud de las autoridades estadounidense.
Del Nero, sucesor de Marín en el cargo, catalogó los sucesos del miércoles como «terribles» para el fútbol brasileño.
Cuatro hombres se declararon culpables en la investigación estadounidense sobre corrupción en el fútbol, que incluye sobornos por más de 100 millones de dólares.
Chuck Blazer, que por casi dos décadas fue el estadounidense de más alto rango en la FIFA, es uno de los que se declaró culpable y coopera con las autoridades, según los documentos que fueron divulgados el miércoles por el Departamento de Justicia.
Blazer se embolsó millones de dólares en comisiones por contratos de mercadeo y además evadió el pago de impuestos.
Las autoridades estadounidenses dijeron que también se declararon culpables Daryan y Daryll Warner, hijos del ex presidente de la CONCACAF Jack Warner, y José Hawilla, un funcionario de la firma de mercadeo deportivo Traffic Sports. Las autoridades estadounidenses dijeron que Hawilla aceptó devolver más de 151 millones de dólares.
Todos encaran sentencian máximas de 20 años de prisión por «conspiración criminal, conspiración para cometer fraude electrónico, fraude electrónico, conspiración para lavado de dinero, lavado de dinero y obstrucción de la justicia».
El principal dirigente deportivo de Rusia dijo que el país no cometió ningún delito cuando ganó la votación para albergar la Copa del Mundo de 2018.
Las autoridades suizas anunciaron el miércoles que investigan el proceso por el que Rusia y Catar fueron elegidos para organizar los mundiales de 2018 y 2022. En una pesquisa separada por parte de las autoridades estadounidenses, siete dirigentes de la FIFA fueron arrestados por corrupción y sobornos.
«No tenemos nada que ocultar», dijo a la AP el ministro de Deportes de Rusia y miembro del comité ejecutivo de la FIFA, Vitaly Mutko. «Estamos listos para mostrar todo».
Dijo que Rusia da la bienvenida a la pesquisa suiza, y aseguró que no afectará la organización del Mundial.
Mutko y el jefe del comité organizador del Mundial de 2018, Alexei Sorokin, dijeron que no han sido contactados por las autoridades.
Un vocero de la UEFA dice que su comité ejecutivo analizará la posibilidad de pedir que se posponga la elección presidencial de la FIFA del viernes tras el arresto de siete dirigentes de la FIFA en Zurich.
Pedro Pinto dijo que esa es una alternativa que se discutirá en la junta de emergencia convocada para el miércoles en Varsovia por el presidente de la UEFA, Michel Platini.
El liderazgo de la UEFA respalda al príncipe Alí bin al-Hussein en la votación del viernes, en la que el presidente Joseph Blatter es el favorito para ser elegido para un quinto período de cuatro años.
Blatter no está entre los dirigentes arrestados el miércoles a solicitud de las autoridades estadounidenses, y su portavoz indicó que coopera con las autoridades judiciales.
La UEFA se reúne en Varsovia donde sus líderes acudirán el miércoles a la final de la Liga Europa.
Las votaciones sobre la sede de los mundiales de 2018 y 2022 no se repetirán, señaló la FIFA el miércoles.
El anuncio se produjo el miércoles, el mismo día en que 7 directivos de la FIFA fueran arrestados en Zúrich siguiendo una orden de detención estadounidense, el FBI registró la sede del organismo CONCACAF en Miami Beach y las autoridades suizas anunciaron una pesquisa penal relacionada con la asignación de los mundiales de 2018 a Rusia y de 2022 a Catar.
«Se jugarán Rusia y Catar», afirmó el portavoz de la FIFA, Walter de Gregorio, en una rueda de prensa.
La FIFA entregó en noviembre a la justicia suiza un informe de Michael Garcia sobre la corrupción que rodeó a la designación de Rusia y Catar como anfitrionas del mundial. De Gregorio prometió el miércoles que el informe se hará público en algún momento, pero sólo cuando se hayan resuelto las investigaciones penales.
Agentes del FBI y el Servicio Interno de Ingresos (IRS, por sus siglas en inglés) ejecutaron varias órdenes de registro en una redada en la sede de CONCACAF en Miami Beach.
Los registros del miércoles de madrugada en la organización que regular el fútbol en Norteamérica, América Central y el Caribe se produjeron unas horas después de que las autoridades suizas detuvieran a siete directivos de la FIFA en Zúrich a petición de Estados Unidos.
La fiscal general de Estados Unidos, Loretta E. Lynch, dijo el miércoles en un comunicado sobre el caso que «La orden de acusación alega que la corrupción es rampante, sistémica y profundamente arraigada tanto en el extranjero como aquí, en Estados Unidos».
Los agentes en Miami llegaron al edificio cargando cajas de cartón, que podrían haberse empleado para guardar pruebas reunidas en el lugar.
Ni el FBI ni el IRS hicieron comentarios sobre la investigación. Nadie respondió al teléfono en la sede de CONCACAF en Miami Beach.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, está «tranquilo», indicó el portavoz de la FIFA Walter de Gregorio después de que las autoridades suizas detuvieran a siete directivos del mundo del fútbol en Zúrich.
Las autoridades estadounidenses emitieron una orden de arresto contra nueve miembros de la FIFA y los cuerpos de seguridad suizos detuvieron a siete de ellos el miércoles por la mañana en Zúrich, donde se han reunido cientos de directivos del mundo del fútbol para el congreso anual del organismo. Blatter no fue arrestado y se presenta a un quinto mandato como presidente en las elecciones del viernes.
Blatter «está muy tranquilo, ve lo que ocurre, coopera por completo», señaló De Gregorio en una rueda de prensa organizada a toda prisa.
«El factor de estrés es un poco más alto de lo que era ayer (…) pero él sabe que no estaba implicado», añadió el vocero.
De Gregorio dijo que el presidente de la FIFA «no está bailando en la oficina». Las elecciones presidenciales del organismo, para las que Blatter es favorito, se celebrarán como estaba previsto.
Entre los siete directivos arrestados y detenidos por la policía suiza en Zúrich a petición de las autoridades estadounidenses hay dos actuales vicepresidentes de la FIFA y algunos de los dirigentes más destacados del fútbol latinoamericano, señalaron las autoridades de Estados Unidos.
Jeffrey Webb, de Islas Caimán, vicepresidente de la FIFA y presidente de la CONCACAF; y el uruguayo Eugenio Figueredo, representante de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) ante la FIFA y vicepresidente de la FIFA, fueron arrestados el miércoles por la mañana en el hotel Baur au Lac Hotel en Zúrich.
También fueron detenidos Rafael Esquivel, vicepresidente de la Conmebol y presidente de la federación venezolana de fútbol; Eduardo Li, presidente de la Federación de Fútbol de Costa Rica; el nicaragüense Julio Rocha; el británico Costas Takkas, y el brasileño Jose Maria Marin. Los siete están relacionados con las federaciones regionales de Norte América y Sudamérica.
Otros investigados son el paraguayo Nicolás Leoz, ex presidente de la Conmebol y el ex directivo de la FIFA Jack Warner.
«La orden de acusación alega que la corrupción es rampante, sistémica y profundamente arraigada tanto en el extranjero como aquí, en Estados Unidos», señaló en un comunicado la fiscal general del estado, Loretta E. Lynch.
Esta corrupción «abarca al menos dos generaciones de directivos de fútbol que, supuestamente, abusaron de sus posiciones de confianza para adquirir millones de dólares en sobornos», afirmó.
El portavoz de la FIFA Walter de Gregorio indicó que no era una sorpresa que las autoridades suizas hicieran detenciones relacionadas con un caso de corrupción en el organismo que rige el fútbol mundial. La única sorpresa, dijo, fue que los arrestos llegaran el miércoles.
La propia FIFA entregó a la justicia suiza el pasado noviembre el informe del investigador Michael García sobre la designación de Rusia y Catar como anfitrionas de los mundiales de 2018 y 2022, dijo De Gregorio. De modo que las detenciones fueron «las consecuencias de lo que nosotros iniciamos».
Seis directivos del mundo del fútbol fueron arrestados el miércoles por la mañana en Zúrich por las autoridades suizas en relación a un caso de corrupción en Estados Unidos. Horas más tarde, la fiscalía suiza anunció la apertura de una investigación penal distinta relacionada con la asignación de los mundiales de 2018 y 2022.
«La FIFA es la parte perjudicada», afirmó ante la prensa el portavoz de la FIFA Walter de Gregorio tras la revelación de dos grandes investigaciones judiciales en torno a la FIFA.
«De nuevo, es la FIFA la que sufre en estas circunstancias», dijo De Gregorio, que insistió en que el Congreso de la FIFA, que reúne a directivos del fútbol de todo el mundo, seguirá adelante como estaba previsto.
La oficina del fiscal del distrito este de Nuevs York investiga a las personas detenidas por sospechas de que aceptaron sobornos entre principios de la década de 1990 y la actualidad, indicó la Oficina Federal de Justicia suiza en un comunicado.
«Los sospechosos de sobornos —representantes de medios deportivos y firmas de promoción deportiva— están acusados de participar en tramas para hacer pagos a ejecutivos de fútbol (delegados de la FIFA) y otros funcionarios de organizaciones filiales de la FIFA, que ascendieron a más de 100 millones de dólares», señaló el comunicado de la justicia suiza. «A cambio, se cree que recibieron derechos de patrocinio, publicidad y contenido en medios relacionados con torneos de fútbol en América Latina».
La fiscalía suiza abrió un proceso penal relacionado con las votaciones para designar a la ciudad anfitriona de las copas del mundo de fútbol de 2018 y 2022. La noticia agravó la crisis en la que estaba sumida la FIFA, apenas unas horas después de que seis directivos del mundo del fútbol fueran arrestados en otro caso sobre corrupción iniciado en Estados Unidos.
Las autoridades suizas confiscaron «datos electrónicos y documentos» en la sede de la FIFA como parte de su investigación, dijo la oficina del fiscal. La policía federal indicó que interrogaría a los 10 miembros del comité ejecutivo que participaron en las votaciones en diciembre de 2010.
La pesquisa sobre «personas desconocidas por sospechas de delitos de mala gestión y blanqueo de dinero» vuelve a arrojar dudas sobre la integridad de las votaciones que ganaron Rusia y Catar.
