Santo Domingo.- La Unión de Comerciantes y Empresarios del Nordeste (Ucenor) convocó al comercio de San Francisco de Macorís a cerrar las puertas el próximo 9 de enero en protesta por la instalación de impresoras fiscales en los comercios.
La entidad, que agrupa al comercio organizado de esa zona del país, sugirió a sus comercios afiliados a estar atento a las disposición de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) de instalar las impresoras fiscales en establecimientos de personas físicas o morales, a principios de este año.
Ucenor explicó en un comunicado que la DGII informó «de que el que no cumpla con la instalación de esos equipos tendrá que pagar una multa a partir del mes en curso de 50 mil pesos o cierre de su establecimiento por cinco días hasta tanto pueda ponerse de acuerdo con la entidad recaudadora del Estado».
En ese sentido, convocó a todo el comercio para que el próximo jueves 9 de enero todos los negocios que tienen que cumplir con esa disposición cierren sus puertas en rechazo a la medida.
Destacó que el llamado a paro «es solo el principio de la lucha para que la medida no se aplique, ya que se podría llamar a un paro general del comercio en todo el país».
Ucenor dijo que la instalación de dichas impresoras «se hace imposible debido a la implementación de una reforma fiscal, que aumenta del 8 % al 11 % productos como el azúcar, café, yogurt, chocolate, margarina, aceite, entre otros, lo cual desacelerará la economía y provocará una incertidumbre mayor en el consumidor y al pueblo en sentido general.
Por tales motivos, la entidad solicitó al presidente Danilo Medina dejar sin efecto dicho aumento y la implementación de las impresoras fiscales.
«El costo de instalación de dicha impresoras es inalcanzable, para citar un ejemplo para un pequeño salón de belleza, una tienda de celulares, una relojería o un colmado que asciende a más de 150,000 pesos, más el mantenimiento y si éstas dejan de funcionar hay que cerrar las puertas del establecimiento porque son intocables a menos que no sea por un inspector de la DGII», afirmó Ucenor.
