Barack Obama ha negado la afirmación de Vladímir Putin de que la oposición siria tiene responsabilidad en el ataque con armas químicas del 21 de agosto, pero aprecia el papel que Putin ha jugado en la búsqueda de una solución diplomática para Siria.
Obama reconoció que la participación del presidente ruso ha resultado muy productiva, y añadió que Siria debe presentar pruebas contundentes de la destrucción de todas las armas químicas.
«A pesar de todas nuestras diferencias, creo que Vladímir Putin juega un papel muy importante», dijo Obama. Sin embargo, insistió en atribuir al régimen de Bashar al Assad el uso de armas químicas: «Nadie en el mundo puede tomar en serio la idea de que lo hicieron los rebeldes».