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Investigan si fue homicidio o suicidio muerte de abogado en playa de Nagua

Investigan si fue homicidio o suicidio muerte de abogado en playa de Nagua
Investigan si fue homicidio o suicidio muerte de abogado en playa de Nagua

Había manifestado en Facebook que extrañaba a su madre muerta

SAN FRANCISCO DE MACORÍS, RD.- Las autoridades investigan las circunstancias en que perdió la vida un reconocido abogado de Nagua, provincia María Trinidad Sánchez, cuyo cadáver fue hallado la mañana de este jueves en una playa de dicha localidad con un disparo en la cabeza.

Se trata de Jesús Manuel Hernández Ozoria, alias Papachu, y quien presenta una herida de bala en la cabeza, según confirmaron autoridades policiales en la indicada localidad del Noreste.

Este hecho de sangre ha llenado de consternación a los residentes de Nagua, donde el profesional gozaba de gran aprecio.

El cuerpo sin vida del abogado fue encontrado pasadas la 11:00 am en los alrededores de la playa Gringos, desconociéndose hasta el momento si fue ultimado por alguna persona o si se trató de un suicidio.

Hernández Ozoria era el presidente de la firma de abogados Hernández  y Asociados.

Según fuentes  confiables, el jurista había salido a caminar  por la zona donde fue encontrado su cadáver, por lo que  se desconoce si  se trató de un hecho delictivo o si fue él quien determinó quitarse la vida.

En las próximas horas el cuerpo de Hernández Ozoria será trasladado a la ciudad de San Francisco de Macorís para realizarle los estudios de autopsia correspondientes.

Ayer, el joven abogado había visitado la tumba de su madre en el cementerio municipal, a donde había manifestado la falta que ésta le hacía, ya que lleva siete años de haber fallecido.

En su cuenta de la red social Facebook el abogado había posteado:

“Mami: Sietes (7) años han pasado y parece que fuera ayer cuando he tenido que afrontar esa terrible angustia que nos dejaste al perderte madre, de seguro estarás muy bien y me alegra bastante porque eso me invita a luchar por seguir adelante, imaginando que desde arriba observas todos mis pasos y deseo que estés orgullosa de mí o que al menos me comprendas, echo de menos tus palabras de motivación, de invitación a seguir adelante sin desmayar, el reproche te acompañó para dirigir nuestros caminos cuando niños pero ya de adultos dabas consejos siempre con amor y eso lo añoro hoy más que nunca”.

Fuente: CitySantiago

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