Estados Unidos.- El 2020 podría ser un gran año para el género femenino en los Estados Unidos. Mientras que es posible que una mujer ocupe el salón oval de la Casa Blanca si la precandidatura de Hillary Clinton prospera y resulta elegida en los comicios de 2016-, el rostro de otra fémina podría protagonizar el billete de veinte dólares por primera vez en la historia, informó este sábado un artículo publicado en el diario El País.
Barbara Ortiz Howard, una contratista cansada del dominio de los hombres en su negocio, un día se dio cuenta de que hasta el dinero que manejaba estaba repleto de figuras masculinas y decidió que era momento de hacer algo para cambiarlo.
Junto a Susan Ades Stone, una amiga y periodista, inició una campaña en la web denominada Woman on 20s, que finalizó el domingo pasado con el nombre de la figura femenina ganadora, a través del voto de 600.000 personas emitidos desde el 1 de marzo.
Antes de eso, Howard había enviado un correo electrónico con copia a todas sus amigas, conocidas y clientas en el que les manifestaba lo que ella sentía como una injusticia, y les consultaba a qué mujer elegirían para los billetes, si tuviera que decidirse por una. La pregunta que surgió entonces fue: «¿A cuál de los hombres echamos de uno de nuestros billetes?».
Todo indicaría que quien va a ser desplazado de su billete de veinte dólares es Andrew Jackson, el presidente estadounidense que -paradójicamente- se manifestó en contra del papel moneda cuando esto era motivo de discusión en el país.
Y desde este domingo, ya hay un reemplazo. Entre más de 15 candidatas femeninas entre las que figuraban Rosa Parks, Eleanor Roosvelt, Betty Friedman, Patsy Mink y Frances Perkins, la ganadora resultó Harriet Tubman, quien escapó de la esclavitud y ayudó a muchos otros a hacer lo mismo, incluso arriesgando su propia vida.
De acuerdo con las impulsoras de la iniciativa, recoge El País, para reemplazar la imagen de uno de los billetes en circulación sólo haría falta el visto bueno de Obama y su firma, aunque ya es conocida la buena voluntad del presidente demócrata en este asunto.
Ese año se cumplirá el centenario del sufragio universal en los Estados Unidos, con lo que la reivindicación sobre los billetes -que no se modifican desde 1929- podría cobrar un significado especial.
