Los equipos de rescate de Quebec seguían buscando este viernes entre los escombros cubiertos de hielo a las víctimas del incendio que arrasó una residencia de ancianos en Isle-Verte y que podría haber provocado más de 30 muertos.
«Todos los focos (del incendio) han sido controlados», informó durante una rueda de prensa el portavoz de Seguridad de esta provincia del este de Canadá, Guy Lapointe.
Un total de 20 personas pudieron huir del incendio de las entre 50 y 60 que vivían en los 52 alojamientos de la residencia. Laas autoridades de Seguridad afirman que al momento hay cinco muertos y 30 desaparecidos.
Las autoridades han tomado medidas excepcionales debido a las condiciones meteorológicas y al derrumbe de los escombros. La gran cantidad de agua que cayó sobre los restos de la residencia crearon una capa de hielo de unos 30 centímetros, dijo el jefe de los bomberos, Yvon Charron.
El viento hacía que la sensación térmica se acercara a los -30 grados en Isle-Verte, una localidad de 1.400 habitantes 230 km al noreste de Quebec y situada junto al río San Lorenzo.
Los equipos de emergencia y los investigadores se alternan las tareas para poder entrar en calor. Sobre el terreno, tres equipos técnicos de la policía científica, de los bomberos y especialistas en identificación de cadáveres operaban «de forma rotativa con el frío que azota», señaló Lapointe.
(Información de NTN24)
